Ayer fue un magnifico día,
por fin Ricardo nos ha venido a visitar a Salamanca. Desde que vinimos de
Madrid estábamos organizando una reunión de los amigos/compañeros de AR.
Lo que en un principio pensábamos
hacer de reunirnos todos, lamentablemente por circunstancias personales de los ser.
Lacalle, Cano-Cortes y Barbeira no ha podido llevarse a cabo; pero Ricardo,
como dice el refrán “buey solo bien se lame”, aquí se presentó para compartir
con los Alvarez un día de mesa, mantel y mucha mucha conversación.
Como de costumbre cada
vez que nos visita, viene siempre acompañado de un obsequio, esta vez una
bebida espirituosa como la que se sirve en el bar del Congreso, eso sí pagada
sin subvención y precisamente desde ayer con la consabida subida de impuestos,
no hay manera de hacerle entender que solo con su compañía tenemos bastante y
entre nosotros los jubilados estos dispendios están de más.
Lola preparó un ágape muy
familiar a base de gazpacho andaluz y de segundo una exquisita menestra de
carne y verdura que disfrutamos a la sombra bajo el porche con una magnifica
temperatura a pesar del día de sofocante calor que tuvimos.
Tarde de charla y siesta,
yo si no doy “una cabezadita” soy hombre que se arrastra hasta pasar “la crisis”,
así que tuvimos tiempo de sobra para charlar de miles de asuntos, divinos y
humanos.
Luego nos fuimos a “quemar
la noche Salmantina” , nos encontramos con Carlota y ¡ale! a tomar tapas y
cortos de cerveza son limón, vamos un “desparrame” hasta cerca de la una de la
madrugada que regresamos a casa, donde aún continuamos hablando como si nos hubiésemos
olvidado de algo.
Hoy a la mañana temprano
Ricardo se marchó hacia tierras Vallisoletanas, concretamente a Iscar para
visitar a su familia; este hombre es un excelente relaciones publicas y tiene
contactos hasta en el infierno.
Buen viaje amigo y
nosotros a la rutina diaria.
Me vas a poner colorado.
ResponderEliminarUn abrazo