sábado, 26 de mayo de 2012

ONCE ALDEANOS Y UN DEMAGOGO DEL FUTBOL


La diferencia que existe entre los grandes equipos de futbol y los otros es que los primeros juegan las finales para ganarlas y los otros juegan acomplejados. Esto es lo que les ocurrió anoche a los jugadores del At. de Bilbao, ni ellos mismos antes de comenzar el partido se creían que iban a ganarlo y mira que le pusieron interés, pero se pasaron el partido persiguiendo el balón con lo que eso cansa y cuando lo tenían, demostraban la calidad que tienen, incapaces de hacer un gol.
Menudo repaso que les han dado en menos de quince días, primero en Bucarest y anoche en el Manzanares, probablemente estas dos derrotas les vuelvan a poner los pies en el suelo, si es que en algún momento se habían creído que iban a conseguir alguna de las dos copas.
Este grupo de aldeanos dirigidos por un demagogo del futbol que vende humo les vino muy grande los dos acontecimientos, no se dan cuenta que el sr. Bielsa nunca ha ganado nada importante (excepción de la medalla de oro olímpica con Argentina), eso si, tiene un gran predicamento entre la prensa de esta país, no acierto a entender por que, tal vez es que da mucho juego en las entrevistas, a mi me parece un aburrido que siempre habla mirando al suelo. Solo quiero recordar dos datos: en el Campeonato de Liga 2010 – 2011, el At. de Bilbao termino en sexto lugar con cincuenta y ocho puntos, por tanto en puestos de Europa Lige; este año en manos del “profesor Bielsa” han terminado decimos con cuarenta puntos, vamos que si no es por la final de anoche aunque perdida, la próxima temporada iban a jugar el campeonato europeo de casados contra solteros: eso sí el sr. Caparros mascando chicle no les da tanto juego a la prensa y a este “profesor” se le perdona todo.
En cuanto a lo del himno, me parece un bochornoso espectáculo, efectivamente si a los que ayer estaban en el Manzanares no les representa el himno de España, no comprendo porque han venido a jugar la final. Que se queden con su copa de Cataluña y con un apasionante final contra el Masnou y los otros que les copien la idea y jueguen la copa vasca contra el Amorebieta, eso si en el descanso, pueden cortar algún árbol y levantar alguna piedra, todo muy rural. Estoy seguro que en ningún lugar del mundo sucede lo que en Madrid anoche, a nadie con un mínimo de civismo y educación se le ocurriría silbar un símbolo de la nación donde viven y por supuesto si algún descerebrado  lo hace, doy por seguro que se atiene a las consecuencias, pero aquí apelamos a la libertad de expresión como el bálsamo mágico que sirve para todo, en este caso para proteger a unos cafres.


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